En Perú festejó Universitario, otro campeón. Le ganó a Alianza Lima, que finalmente estará en el grupo de la Libertadores con Estudiantes, además del Bolívar de La Paz y un rival a definir. El gol lo hizo en el día de su cumpleaños el histórico Nolberto Solano (de penal) y en el equipo ganador juega el veterano Carlos Galván, aqué que jugó en Banfield y Lanús, también en Racing y en el fútbol brasileño. Así, el equipo de la Crema fue campeón después de nueve años y va a la Libertadores con Lanús, Blooming y uno que venga del repechaje.En Paraguay también hubo campeón. Y de un equipo (dirigido por el histórico Ever Almeida, ex arquero) que hacía tiempo no salía: nada menos que 63 años. Fue pura fiesta y sufrimiento tras el 0-0 con Olimpia, porque dependía de otro resultado. Finalmente Libertad perdió con Tacuary y por eso Nacional quedó un punto arriba.
Por la noche, hubo otro campeón, que gritó después de mucho, desde cuando estaba Passarella en el club. Uno con acento argentino. No fue Emanuel Villa el héreo del fútbol mexicano sino que dio la vuelta José Basanta, aquel ex defensor de Olimpo y Estudiantes. Después de dar vuelta el primer partido que perdía 3-1, Rayados de Monterrey fue al DF y se la bancó contra el Cruz Azul: ganaba 1-0, le empataron a diez del final y lo definió uno de los mejores del torneo: el Chupete Suazo, figura de la selección de Bielsa.
